Sitio simplemente espectacular... panadería ecológica y con todo hecho a mano y en horno de leña. Pequeña empresa familiar con un trato tan bueno que se nota la pasión y dedicación total de toda la familia. Los panes del padre buenísimos y de una variedad de ingredientes y sabores que te dejan con boca abierta pidiendo más sabores... a ver qué inventos y combinaciones más puede sacar ese maestro de su horno?! Las magdalenas, galletas y brownies de su hija que muestran la pasión que se heredó de su padre. Y el trato tan amable en el mostrador a mano de su hijo... realmente vale la pena subir a conocerles y sus productos artesanales y auténticos... imposible que no te quedas impresionado con su labor y sus frutos!!! También tienen puntos de ventas en varias tiendas ecológicas de la isla. Nuestros favoritos? Difícil, pero probablemente el pan de calabaza, las galletas de manises y los brownies!
Réponse du propriétaire :
Muchísimas gracias!! No sabes cuanto nos inspiran palabras así!! Esperamos volver a verte pronto en Valleseco! 🙏🏻